El hotel es un lugar tranquilo, con habitaciones amplias y una piscina perfecta para relajarse después de explorar los alrededores. El personal fue muy atento y me ayudó a planificar mis excursiones.

La piscina a nuestros pies

Nuestra experiencia en el Hotel Baan Ratchiangsaen fue maravillosa. La habitación era enorme, impecable y con acceso directo a una piscina que era un auténtico deleite tras un día de exploración. La ubicación es ideal. aunque un poco alejada del bullicio del centro, está a solo unos minutos a pie, lo que brinda un equilibrio perfecto entre tranquilidad y acceso a la vida local. Además, el personal fue extremadamente amable y siempre dispuesto a ayudar.

Sin embargo, el hotel podría beneficiarse de una renovación, ya que algunas instalaciones y el mobiliario se notaban algo desgastados. Aunque la limpieza diaria era buena, ciertos detalles como la presión del agua en la ducha podrían mejorarse y el servicio de bar-restaurante era inexistente, lo que fue un inconveniente.

La habitación era muy cómoda y tenía acceso directo a la

piscina. Estuvimos cuatro noches y disfrutamos del ambiente tranquilo del hotel. La cercanía al centro fue una gran ventaja, ya que podíamos explorar fácilmente la zona. Sin embargo, el desayuno podría ser más variado para mejorar la estancia.

Nuestra familia joven disfrutó de una estancia maravillosa. La habitación era amplísima y muy limpia, lo cual fue ideal para nosotros con un niño pequeño. La piscina fue un gran atractivo, pues resultó ser un lugar perfecto para relajarnos después de nuestros paseos. Además, la ubicación era excelente, ya que estábamos a poca distancia a pie del mercado nocturno. Allí pudimos degustar comida fresca y deliciosa, lo que hizo que nuestras cenas fueran muy agradables. apreciamos la cercanía a tiendas y supermercados, lo que facilitó mucho nuestra estancia.

Sin embargo, notamos que la presión del agua en la ducha era bastante baja durante nuestra estancia.

El hotel es una joya en apariencia, pero el agua de la ducha, ¡ay! , salía casi fría y con muy poca presión. Además, me sorprende que no haya alguien en recepción a cualquier hora. Como huésped exigente, esperaba un upgrade o al menos un pequeño obsequio por molestias. Cuánto me duele no poder escribir una buena crítica.

El hotel está a solo 10 minutos del mercado Gat Gawm, ideal para pasear. La piscina fue perfecta para refrescarnos después de explorar la ciudad con hijo. fue muy útil que pudimos alquilar una moto directamente allí.

Según mi mujer, faltó más personal en recepción durante picos de actividad.

recomendaría este lugar para una escapada

Amplias habitaciones, excelente atención, ideal para relajarse tras explorar la ciudad, pues está a solo 3.5 km del centro lo que facilita las visitas a lugares icónicos y la piscina fue perfecta para refrescarnos después de un día caluroso.

Todo estupendo

La piscina de agua salada fue agradable, pero el Wi-Fi bastante lento.

La habitación era amplia y limpia, con personal siempre atento a ayudar. Sin embargo, la ducha tenía baja presión y el agua salía fría por la mañana. La ubicación es un poco alejada de las atracciones principales, pero es perfecta para quienes buscan tranquilidad.

La habitación era enorme y muy limpia, con acceso directo a una piscina que era un auténtico deleite tras un día de exploración. La ubicación es ideal, aunque un poco alejada del bullicio del centro, está a solo unos minutos a pie, lo que brinda un equilibrio perfecto entre tranquilidad y acceso a la vida local.

La ducha tenía baja presión y el agua salía fría por la mañana.

Las habitaciones son amplias y limpias, el aire acondicionado funciona muy bien. La ubicación es perfecta, a solo unos minutos del casco antiguo y los puestos de comida. La atención del personal increíble, siempre dispuestos a ayudar!

No tengo absolutamente nada que criticar.

Disfruté de la tranquilidad del lugar, justo lo que necesitaba para relajarme después de mis paseos. La piscina fue un gran alivio en el calor, perfecta para refrescarme. En cinco minutos, logré llegar a varios restaurantes locales. El personal fue amable y me ayudó a coordinar mi traslado al aeropuerto sin problemas. Como amante de la buena comida, aprecio lo accesible que estaba la gastronomía local.

Ubicación un poco alejada del bullicio, lo que podría ser complicado para algunas familias a la hora de cruzar las calles. La ducha tenía baja presión en ciertos momentos.

La habitación era muy grande y bonita. La piscina está justo a la puerta, un lujo. La ducha no tenía buena presión. Además, el agua salía fría por la mañana.

El lugar es súper cómodo, la habitación enorme y la piscina a pie de habitación, ¡qué placer! Además, en cinco minutos llegas al centro. Perfecto para relajarse después de un día de paseo.

Pero, ay, la presión del agua en la ducha me hizo sentir que estaba tomando una siesta en una cascada de hámsteres.